Antes de entrar en el mundo de la productividad, debes definir claramente lo que es y qué significa para ti.
Las definiciones son esenciales en la vida porque, a partir de ellas, se pasa a la acción.
De Qué No Trata la Productividad
La productividad no consiste en controlar cada segundo de tu vida.
No consiste en sufrir.
La quieres para tener una vida mejor.
Una vida de plenitud que te lleve hacia la felicidad.
Estás aquí para disfrutar de la vida, una vida de alegría.
No estás aquí para correr una carrera interminable en la que cumplir objetivos que no tienen ningún sentido.
Si solo centras la productividad en los resultados, los productos obtenidos, los objetivos alcanzados, etc., estás cavando tu propia tumba.
De Qué Trata la Productividad
Afirmo que la productividad es rendir al máximo sin quemarse.
La productividad es una forma de hacer las cosas para alcanzar la relajación y la tranquilidad. Cuando entiendes eso, empiezas a crear los flujos de trabajo que necesitas para vivir de esa manera.
Tienes que buscar apps que te ayuden a alcanzar ese estado agradable y deseable.
Todo empieza así a tener sentido.
La productividad es una forma de sacar lo mejor de tu tiempo, es decir, de tu vida.
Un sistema de productividad sólido te ayuda a gestionar cualquier tipo de situación sin estrés, ansiedad, o cualquier otra emoción negativa.
La productividad consiste en saber manejar los imprevistos, porque el mundo actual es un caos de situaciones inesperadas, fuera de tu alcance. Situaciones que surgen de la nada.
La productividad consiste en tener una sensación de control sobre una situación en lugar de lo contrario.
La productividad consiste en ser flexible, tener la mente abierta y moverse con fluidez entre todos tus datos y la enorme cantidad de información que manejas a diario.
Conclusiones
- Antes de enfrentarte a tu sistema de PKM y la productividad, pregúntate qué quieres obtener de él.
- A partir de ahí, define los flujos de trabajo que te conduzcan hacia ese trayecto.
- No olvides nunca que la productividad es un viaje, nunca un destino.
Foto de Aaron Burden en Unsplash.