He conocido a genios increíbles que lograron grandes objetivos en la vida.
Ellos me inspiraron para simplificar las cosas y buscar el éxito.
Mi punto de partida es el listado de mis proyectos.
Es el comienzo de mi planificación porque es donde puedo ver todas mis "cosas grandes".
Dentro de cada proyecto, creo mis dos siguientes niveles para poder hacer zoom:
- Tareas.
- To-dos.
Las tareas me indican los pasos que debo seguir para completar cada proyecto y alcanzar mis objetivos.
Si necesito profundizar aún más en una tarea, creo to-dos dentro de ella.
La cuestión es que, una vez que he definido los proyectos, las tareas y los to-dos, ¿cómo los pongo en marcha?
¿Qué es el Bloqueo de Tiempo?
He llegado a la conclusión de que el bloqueo de tiempo es la mejor técnica para ser productivo.
Gestionamos tiempo, no tareas ni to-dos.
Bloquear tiempo es simplemente decidir cuánto tiempo te llevará una tarea o estás dispuesto a dedicarle y ponerlo en un calendario.
Respetar ese bloqueo de tiempo es lo que te hará avanzar hacia tus objetivos.
La cuestión es:
- ¿Cómo representas ese bloque de tiempo?
- ¿Qué duración debería tener ese bloque de tiempo?
¿Cómo Puedes Implementar el Bloqueo de Tiempo?
He probado de todo, desde bloques de tiempo de 15 minutos hasta otros más grandes (3-4 horas).
He utilizado calendarios, aplicaciones y todo lo que te puedes imaginar.
Mi momento "eureka" llegó cuando vi a personas que han logrado una gran cantidad de objetivos en sus vidas, trabajando con simples listas de tareas, usando lápiz y papel.
Eso me llevó a la simplificación. Fue entonces cuando mi vida cambió.
Mi Técnica para Implementar el Bloqueo de Tiempo
Dejé los calendarios y los gestores de tareas.
Dejé, simplemente, que apareciera el sentido común.
Sigo estos pasos cada día:
- Miro los proyectos y tareas que había planificado previamente en función de mis prioridades.
- Escribo todas las tareas que quiero hacer hoy. Utilizo bloques de tiempo de 1 hora como mínimo.
- Las muevo hacia arriba y abajo en función de la prioridad.
- También las muevo hacia arriba y abajo, separando las que voy a hacer por la mañana y por la tarde en función de mis niveles de energía.
- Las ordeno. Eso me da secuencialidad, evitando la multitarea.
- Empiezo a hacer.
Conclusiones
- No hace falta un calendario porque solo vas a hacer 3-4 cosas por la mañana y 3-4 por la tarde.
- Así es como paso menos tiempo organizando y más tiempo haciendo.
- La vida es sencilla. Nuestros sistemas también deberían serlo.
Foto de Glen Carrie en Unsplash.